domingo, 9 de enero de 2011

Parece mentira que haya pasado tanto tiempo desde aquella vez en que nos besamos bajo las luces cegadoras del lugar.
Típica historia de amor, donde uno de los personajes principales deja su otra parte del corazón en una cuidad donde no es la de él...
Promesas que hasta el día de hoy no se cumplieron, pero hay algo más que promesas, besos, caricias, palabras que nunca se olvidarán...


"Recuerdo el tema que bailamos por primera vez, y aún así todavía hoy, no lo puedo escuchar sola, han pasado ya tres años exactamente 1095 días, parecen pocos números, pero demasiado tiempo muerto en mis ojos.
Siento que las palabras se las llevaron el viento hace mucho, pero aún sigo creyendo que son verdaderas.
"Con lo que te quiero de seguro me enamoro de vos"
Parece hipotético esto, y aún así un simple gesto de amor a la distancia lo cambia todo.
Repentinamente empiezo a recordar todo lo que vivimos, caminando una noche de verano bajo el cielo azul y el reflejo de la luna en nuestros ojos...
+ ¿Vamos a caminar a la playa? ¿Te gustaría?
- Me encantaría. Bajamos por acá y vamos directo a la escollera o al agua.
+ ¿Te puedo tomar de la mano?
- No tenés que preguntarlo, simplemente no busques respuestas a algo obvio.
Voy a ser sincero con vos, nunca he vivido algo así, y es difícil no poder mirarte sin poder quitarte un sólo segundo mis ojos de vos, pero soy consciente de que dentro de una semana esto va a ser un recuerdo y por más que duela esto es así.
¿Asumimos el riesgo o dejamos que tiempo nos dé sorpresas?
¿Sabes? Es raro, pero debo de aceptar que esta conexión que tengo con vos, no la tuve con nadie más, me siento libre estando con vos, y no lo quiero perder si es real, dejemos que el tiempo nos dé lo que deseamos...




Por un tiempo voy a retirar de mi mente toda la belleza de sus palabras, y sus promesas, para adentrarme en mi misma, para saber si estoy dispuesta a seguir esperando después de tanto tiempo, que vuelva a mi.
Sostengo mis lágrimas en mis manos para que no dejen huellas en estas hojas.
Y siento que un punto final a esto toda historia de amor la tiene, y por más que tenga la fuerza para poder esperarlo. No sé si vamos a ser los mismos.
Comienzo a creer que su amor, no es seguro, y dentro del silencio, comienzan a susurrar palabras que no quiero escuchar, pero es momento de hacerlo.


¿Estas realmente segura de que regresará?"
Abrió los ojos para descubrir que no estaba soñando, abrió los ojos para descubrir que la realidad a veces era mejor que los sueños, y los cerró de nuevo, fuerte fuerte, y deseó instantes eternos, sonrisas de ésas que no tienen fecha de caducidad, justo como ésa que en ese instante se dibujaba en su cara… Abrió una vez más los ojos, y se encontró con otros ojos, igual de mágicos, con ese brillo inevitable que sólo tienen quienes aman…

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