lunes, 14 de febrero de 2011

"Yo tenía una maravilla. Sí, una de esas geniales, que hacen que todo sea perfecto y te llevan por el buen camino. Una de esas que si te dice que te quiere, te quiere. Una de esas que saltan, que te escuchan, que te miran, sonríen, fruncen el entrecejo y dicen cosas sin sentido. Que te dicen que estás guapa aunque haya educación física y lleves el pelo atado, unos leggins y estés sin maquillar. De esas con las que quieres estar todo el día, sin importar lo que digan o lo que pase a tu alrededor. Se podría decir que yo lo tenía todo. Pero soy una inmadura, soy una tonta, no miré bien. No sentí lo que quería sentir y me equivoqué. Me equivoqué del todo.
Aunque digan lo contrario, lloré a lágrima viva, no fui capaz de mirarme a mi misma por lo que hice, me di cuenta de que no podía seguir sin lo que me daba vida, sin lo que hacía que mi corazón latiese. Y no podía y sigo sin poder. Y me duele verle y no poder decirle algo, cualquier cosa que salga de mi boca y que él me diga que ya está, que toda esta mierda se acabó. Pero nunca va a pasar eso.
Ahora no puedo olvidar sus ganas de vivir, de querer. No puedo olvidar su hermosa sonrisa y a mi cabeza sólo vuelve la pregunta ¿por qué?
Pasan ya 6 meses. Medio año. Pero quiero que sepas que lo siento todo. Y que si pudiera hacer algo lo haría. Que sepas que lo paso realmente mal, que todo esto es como una pesadilla y no soy capaz de despertarme. Que si esto continúa, yo no voy a poder seguir."
El texto de arriba lo encontré en un cuaderno viejo, donde solía plasmar mis pensamientos y sentimientos..

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